"Hasta que al fin le ha tocado a usted...jajajaja...y ahora qué me dice?...jajaja...bueno amigo eso confirma lo que siempre le digo...Ahora imagino pondrá más atención a mis palabras" - Nos encontrábamos cenando en un buen restaurante cerca de donde nos hospedábamos.
Él se hospedaba a la espalda de éste restaurante, mientras que yo tenía que caminar una cuadra más para llegar a esa gran casa de fachada blanca que contaba con ocho amplias habitaciones donde yo había alquilado. La casa era lo suficientemente grande en la que el propietario la había acondicionado de forma apropiada para que él viva en la parte de adelante llegando hasta la mitad, dejando en un lado un largo y oscuro pasadizo que teníamos que cruzar quienes ahí alquilábamos.
Hay que reconocer que las habitaciones eran amplias y cómodas y se iniciaban al terminar el área donde vivía el propietario, ocupando el margen izquierdo para dejar suficiente espacio de jardín donde resaltaban 3 inmensos árboles, dos de palmera y uno de mango.
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| Espíritu moviendo la cama |
Nos encontrábamos trabajando en la selva peruana y pronto regresaríamos a casa.
Antes que él empiece a reír a carcajadas le decía:
_ Ayer si que estaba cansado compare...apenas llegué a mi habitación fui de frente a la cama....pero los problemas económicos no dejan dormir...y peor aún que vengan a tocar la puerta a esa hora...pucha...
_ Anda amigo y quién era? - preguntó
_ Quién habrá sido compare...cuando salí a ver quién era, no había nadie...
_ Y lograste dormir?
_ Bueno hasta allí todo parecía normal comparito...pero aquí viene lo curioso...pues volví a la cama y después de un rato de estar con los ojos cerrados sentí que la cama se movió....
_ Jajajaja - ya se estaba riendo - Y qué pasó después?
_ Intenté no hacer caso pues hermano...usted sabe...poco soy de pensar en espíritus y todas esas cosas. Así que nuevamente cerré los ojos para tratar de poner mi mente en blanco...hasta el momento en que otro remezón me hizo saltar de la cama y mirar bajo de ella...
_ jajjajaja
_ Lo único que me quedó fue encender la luz y así pasar la noche...
Como dije al inicio él empezó a reír a carcajadas del susto que yo había pasado y a la vez me recordaba las veces cuando él me hablaba de sus experiencias espirituales y que yo no daba la mayor importancia.
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| Espíritu abandonando el cuerpo |
Tras terminar de cenar y contarle mi tétrica experiencia nos dirigimos hacia nuestros departamentos.
Como he mencionado anteriormente, vivíamos en la misma ruta pero él una cuadra antes que yo.
Al llegar donde él vivía se encontraba un carro de policía que había llegado a constatar la muerte de un hombre que se había caído del tercer piso. Inmediatamente me acerqué a ver...pero lo que vi me dejó aterrado, pues ese hombre que yacía muerto en el pavimento...era ese amigo...sí, el mismo con quién supuestamente había terminado de cenar y contar mi horrible experiencia de la noche anterior.
De pronto siento despertar...estaba en mi cama con las manos en el pecho y vi la luz del foco encendida como la había dejado antes de dormir.
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